Skip to content Skip to footer
Alguna vez he sentido que me reprochaban el hecho de ser sincera y me resulta raro, porque para mí lo que está mal es mentir,. Pero. parece que a algunas personas no les gustan las verdades tanto como dicen. Ojo, no confundamos ser sincera con ser maleducada. Yo me refiero a ser sincera con educación, diciendo las cosas bien pero como son. Igual es por ese tipo de “reproches” que con los años, cuando alguien de mi confianza me pide opinión, le pregunto si quiere que le diga la verdad o lo que quieres escuchar. Así por lo menos me aseguro de si puedo dar mi opinión libremente o si debo cumplir con esa “habilidad social” llamada “pequeñas mentiras”. Y hasta aquí llega mi mini reflexión de primer domingo de septiembre 😉 Aquí podéis leer un poquito más sobre este tema.
Go to Top